La avería de una caldera genera una preocupación. Cuando deja de funcionar, se acaba el agua caliente y las temperaturas bajan dentro de la vivienda. Pero, afortunadamente, los problemas de las calderas tienen soluciones.
Problemas de las calderas más habituales
Básicamente, son estos.
- Baja presión de la cadera. Se descubre mirando el manómetro o el display. La presión de llenado mínima para que funcione una caldera se encuentra entre 0,08 y 0,2 MPa. Vendrían a ser 0,8 y 2 bar. Con una presión inferior a 1, la caldera dará error en pantalla o no funcionará. Se soluciona llenando el sistema hasta alcanzar la presión correcta y purgando los radiadores.
- Estar sin agua caliente o calefacción. La caldera podría tener alguna válvula motorizada defectuosa, el termostato averiado o el vaso de expansión con rotura.
- Pérdida de agua. Podría ser causada por el funcionamiento incorrecto de un componente interno. Las fugas de agua o goteos también pueden presentarse en el circuito de las calefacciones. Comprometen la presión del sistema.
- Tuberías de condensados con congelación. Suele ocurrir en zonas donde las temperaturas están bajo cero durante largas temporadas. Esto afecta a las tuberías por las que se transporta el condensado desde las calderas a los drenajes exteriores. La congelación ocasiona un tapón que impide la evacuación. De esta forma, el flujo de condensado va hacia la caldera.
- Calderas que no se acoplan con el termostato. El funcionamiento del termostato puede verse afectado por el cambio horario o por quedarse sin pila.
- Ruidos inusuales. Conviene llamar a la empresa responsable del mantenimiento. Hay que comprobar que los ruidos no sean causados por una bomba defectuosa o presencia de aire dentro del sistema.
- Radiadores que no encienden o están fríos tras el verano. Se deben purgar los radiadores con el fin de eliminar posibles bolsas de aire. Ha de comprobarse también si la presión del sistema es correcta.
- Caldera que no enciende. Verificar que está enchufada y los valores del magnetotérmico.
- Luces que se apagan y encienden solas en calderas antiguas. Ello podría ser debido a un termopar defectuoso que cortase el suministro de gas. Otras posibles causas serían una acumulación de depósitos o una corriente de aire que apaga la luz.
- Una avería de mayor envergadura, con el consiguiente gasto, a la que podrían llevar los problemas anteriores si no se reparan a tiempo y adecuadamente.
Para evitar un serio deterioro de la caldera, es aconsejable contratar un servicio de mantenimiento con revisión anual. Un mantenimiento correcto alargará la vida útil de la instalación, a la vez que evitará periodos críticos y futuras averías.
Servicio técnico oficial
Los problemas de las calderas tienen solución recurriendo al servicio técnico oficial del fabricante. Reparan todo tipo de averías con plenas garantías. Sus profesionales tienen la formación precisa para llevar a cabo estas reparaciones con solvencia.
